— The Soul Healing Journey Consulting
Le blog
¿Qué es
la Bioexistencia Consciente?
La Bioexistencia Consciente es una invitación a viajar al centro de nosotros mismos...
La Bioexistencia Consciente (BEC) es una corriente filosófica de origen argentino, reconocida principalmente en el mundo hispanohablante y en más de 20 países al rededor del mundo como un camino de consciencia y de reconexión con el Ser.
Su nombre ―término acuñado a partir de la unión de las palabras «biología» y «existencia»- encierra la esencia de su filosofía: llevar una existencia consciente de quiénes somos, de nuestra naturaleza creativa, de los principios biológicos y arquetípicos inconscientes que nos rigen, y vivir en coherencia con ellos.
El BEC ve al ser humano como «creador de su propio universo » y aspira a que el individuo despierte a sí mismo, se reconozca creador de su propia realidad y retome el control de su vida. ¿De qué manera? Dejando de atribuir el destino de su vida a actores o factores ajenos a él, asumiendo la responsabilidad exclusiva de su propia existencia y de todo cuánto crea.
La lógica de la Bioexistencia Consciente
La Bioexistencia Consciente considera que los problemas a los que nos enfrentamos hoy en día tienen su origen en las experiencias traumáticas de las generaciones que nos precedieron y que nosotros, los descendientes, hemos heredado una especie de legado transgeneracional.
Todos heredamos una «bolsa de nudos» formada por historias, dramas y duelos sin resolver. Anne Ancelin Schützenberger
La influencia que esta herencia ejerce en nuestras vidas actúa como un recordatorio de las heridas ancestrales que hay que sanar. Como un sol en torno al cual gira toda nuestra existencia. Toda nuestra vida se construye inconscientemente sobre esta herencia.
Esta herencia, que a menudo se experimenta como un malestar, se la llamará a generalmente «mala suerte», «casualidad» o «maldición» hasta que tomemos conciencia de ella.
Las emociones experimentadas, las dolencias físicas padecidas y las diversas situaciones de vida (enfermedad, divorcio, pérdida del trabajo, depresión, etc.) contienen un mensaje, un significado oculto que, una vez descifrado, te permitirá alcanzar un nivel superior de paz, felicidad, salud y abundancia.
La Bioexistencia Consciente también destaca el hecho de que los seres humanos ―a pesar de la aculturación-, siguimos rigiéndonos por las mismas leyes biológicas comunes a todos los mamíferos. Esto nos llevaría a asegurar la continuidad de nuestra especie, primero buscando nuestro propio territorio y luego buscando hacer una descendencia, a vivir el mayor tiempo posible para criar a nuestros hijos y a permanecer en el clan familiar evitando convertirse en el » mal visto «, de ser excluidos, lo que ya no nos proporcionaría la protección del grupo (individuo excluido = presa fácil para los depredadores = peligro de muerte).
Por esta razón, el bienestar colectivo o el del clan familiar primaría sobre el personal, aunque ello supusiera sacrificar la propia autorrealización.
Desde el punto de vista de la Bioexistencia Consciente, los seres humanos estamos controlados por «hilos invisibles» que nos llevan a tomar decisiones personales importantes (carrera, relación, territorio, etc.) persuadidos de estar haciéndolo libremente. Estos «hilos invisibles» que rigen al ser humano representan los imperativos del inconsciente familiar y colectivo.
La Bioexistencia Consciente en la práctica
En su práctica, el BEC utiliza conceptos como la psicogenealogía, el genosociograma(árbol genealógico comentado), la decodificación biológica y emocional de las enfermedades, los arquetipos y el inconsciente colectivo, familiar e individual.
Mediante ejercicios de búsqueda y liberación de emociones reunidos bajo el nombre de Decodificación Bioemocional, la BEC busca «poner en palabras» nuestras dolencias para descifrar el mensaje que hay detrás de ellas.
Basándose en el«Síntoma«(motivo de consulta), la Decodificación Bioemocional te ayuda a comprender las razones de tus dolencias: dolores físicos y emocionales, enfermedades, síntomas o molestias en tu vida en general, y su lógica. Luego, mediante un ejercicio de rememoración, encontrar el momento en el espacio-tiempo en que se crearon estas dolencias y reparar las distorsiones que dieron lugar a tu malestar.
Durante un «camino» o ciclo de consultas, abordamos todos los aspectos de nuestra vida que definen quiénes somos: nuestra historia personal, familiar y colectiva, nuestro pasado familiar, la transmisión transgeneracional que recibimos de nuestros antepasados (traumas ancestrales no resueltos, duelos no resueltos), las diferentes identidades inconscientes que representamos, las lealtades familiares inconscientes y los acontecimientos significativos de la historia de la humanidad que, de una forma u otra, influyen en nuestras vidas.
Vivir cada día a la manera de la Bioexistencia Consciente
Seguir un ciclo de consultas es, obviamente, la forma más rápida de entrar en el ritmo de la Bioexistencia Consciente, pero no es la única. Vivir la bioexistencia a diario significa priorizarte, despertar a ti mismo, reapropiarte de tu historia personal y alinearte con la lógica biológica que rige toda la existencia.
Reconocerse creador de la propia realidad no es sólo una cuestión de voluntad, sino de un despertar de la conciencia que transforma para siempre nuestra forma de interactuar con la realidad.
El acto de crear está íntimamente ligado a aquello de lo que se alimenta el alma: si alimentamos nuestra mente con información que provoca ansiedad, con una narrativa fatalista llena de oscuridad, no sólo nuestra mente estará perturbada sino que nuestro acto creativo estará impregnado de ello. Por eso la Bioexistencia Consciente nos anima a cultivar activamente nuestro mundo interior y a centrarnos en todo aquello que pueda nutrir positivamente el alma.
Como creadores, es de vital importancia que mantengamos nuestra paz interior y protejamos nuestra burbuja de bienestar, relativizando cualquier cosa que pueda alterar nuestro equilibrio.
Vivir nuestro día a día a la manera de la Bioexistencia Consciente significa vivir en total coherencia con nosotros mismos y con nuestra naturaleza. Es un viaje al centro de nosotros mismos.